jueves, 17 de mayo de 2012

Amado Jacobo


Qué ironía toda esta historia. Siempre te rodearon las mujeres. Amadas, conflictivas, calientes, suicidas, bebedoras, pachecas, hinduistas, yoguis, intelectuales. Imprescindibles. Llegamos a tu entierro como Brujas Macbethianas. Se suponía que no debíamos estar, y sin embargo estábamos. Teatreras al fin. Trajimos a todos los de la Bohemia pululando en la periferia del Monte Sinaí, el panteón donde ahora moras y donde no te podemos llevar cempasúchiles a finales de Octubre.
Tus hermanos Judíos tomaron tu cuerpo, abrieron tu caja y guardaron rezos ahí. No pudimos besar tu hermosa cabeza, tirar un puño de tierra, regar con sal, beber sobre tu tumba. No pudimos jugar a Hamlet, armar una gran escena a tu salud ¡lo merecías!. No pudimos tirarnos sobre tu tumba, por ejemplo, tener ataques de llanto compulsivo, desmayarnos o algo así.
Si andas por ahí, como sospecho, sabrás que el Mal existe. Que una mano obscura tomo tu grande y luminosa Existencia. Que te perdió la Belleza, como siempre, mi hermano. Has sido famoso al fin ¡no sabes cuánto! La radio, la prensa, el internet, como nunca en la vida ¡Actor! ¡Productor! ¡Director! Sabemos algunos, sin embargo, lo que dolía no hacer Teatro, dolía tanto como tus jóvenes amores.
Tus profundidades emocionales insondables fueron un lago infinito, inconmensurable. Tus ojos eternos, tus manos inmensas y cálidas. Entrañable en los escenarios. Lo llenabas todo, como nadie.
Seguro que tú ya no vuelves. Semejante muerte debe haberte lanzado al infinito como un cometa hacia la luz. No hay más Karma, no temas. Ya eres libre. La Maldad pura que te robo la vida se diluye ante tu grandeza en tu viaje de luz.
Espéranos; prepara una estancia bella, de buen gusto, un buen café, finas bebidas, delicias, música entrañable, como en tu casa… ya iremos llegando. 
Es inconmensurable lo que te voy a extrañar. Ve hacia la luz querido. Dolerá como nunca, pero tendremos que estar bien tarde o temprano. Ya nos conoces, no te detengas por este imparable llanto. Nos veremos. Yo lo sé, nos veremos…otra vez.